El segundo disco de Los Viejos por fin vio la luz. Llegué a pensar que alguno de los dos ancianos moriría antes de que grabaran su segundo álbum, afortunadamente me equivoqué. La espera valió la pena.
Son una de mis bandas favoritas, y desde hace varios años quería escribir algo sobre ellos, pero las circunstancias no lo permitían. Esta vez todo se acomodó.
Hace cuatro años, cuando abrí este espacio, pensaba dedicarme a escribir solamente sobre discos clásicos y sus aniversarios. Una que otra reseña de algún concierto, y tal vez sobre discos nuevos (como lo hago en este momento). Jamás estuvo entre mis planes regresar a las coladeras a descubrir nuevas bandas. Toda la primer década del siglo XXI me tenía muy decepcionado (en cuanto a underground nacional se refiere), siempre tocaban las mismas bandas, y en general ninguna llamaba mi atención. Todo eso cambió cuando vi a Los Viejos. Gracias a ellos me regresaron las ganas de conocer y escuchar nuevas propuestas. Los conocí en el 2012, básicamente al mismo tiempo que al colectivo Lxs Grises. Ninguna banda me había emocionado tanto desde Los Esquizitos a finales de los 90's.
Llamaron mi atención por la simple razón de que me parecieron un producto perfecto, me explico: Para empezar son un dúo, si bien a nivel mainstream los White Stripes ya nos habían enseñado que no se necesitan más de dos personas en una banda, y tampoco un bajo, aquí en México no contabamos con muchos ejemplos de ello. Hoy todo es muy distinto, hay como veinte dúos en todo el país, y por lo menos tres son impresionantes: Cardiel, Los Viejos y Terror Cósmico. Aunado a esto son dos tipos que se hacen llamar Viejos y salen a tocar -con un par de máscaras de ancianos- el mejor punk thrash que has escuchado en años, que te obliga a menear la cabeza y/o a meterte al slam. Si no los has visto en vivo, debes hacerlo ya.
En el 2013 su presentación en el Vive Latino detonó la bomba. De repente eran una banda conocida por miles de personas. Llegaron los patrocinios, tours, cientos de nuevos fans, pero ellos seguían con las mismas siete rolas de su disco debut Quebrantahuesos. Y así pasarían unos cuantos años más, hasta ahora.
Los Viejos son Leo Padua 'Eustaquio' - batería, y Jordi Alacont 'Jacobo' - guitarra y voz. Entre Quebrantahuesos y Sociedad del Miedo hay cuatro años de distancia. Y las diferencias son muy notorias en cuanto técnica, letras, producción, etc. SDM estaba destinado a ser un trabajo de alta calidad simplemente por la gente que está involucrada en el. Producido por Miguel Fraino (V34, Cardiel), Mario Juárez (AXPI) y Normand Luna (Tormentas) de invitados especiales, y con Yurex Omazkin y Esteban Azuela encargados del arte. El disco salió bajo el sello Intolerancia.
Sociedad Del Miedo son diez tracks duros, veloces, que muestran una clara evolución de la banda. Riffs filosos y baterías ensordecedoras, juntos suenan como ametralladoras. El solo de Mario en Layback es increíble. Aquí no hay canciones chistosas, como su título lo da a entender, el grito desesperado para que esta sociedad despierte es el tema principal del álbum, todo ello envuelto en un punk thrash rabioso que te dejará fascinado, hay ciertos tintes de metal extremo, esto por Eustaquio que toca en bandas más ruidosas y menos accesibles que Los Viejos, como Bestia y Peste Negra (por si no lo sabían es nuestro baterista favorito, nuestro Dave Lombardo). SDM termina con un track instrumental que se funde con un discurso del escritor, orador, y filósofo Terence McKenna.
Mis favoritas son Por Eso Cuando Naces Lloras y la que da nombre al disco. Toda la rabia y concepto del álbum se resume en el grito de Jacobo a la mitad de Cuenta Regresiva:
¡No Seas La Bestia Que Quieren Que Seas!
Estoy seguro que en el futuro, Sociedad Del Miedo será un referente obligado de la música nacional.
El primer video y single. Dirigido por Esteban Azuela, con dibujos de Yurex Omazkin y Esteban Azuela.